El fin de semana comenzaba bien cargado de eventos...reuniones de Radio María, de Confirmación de Adultos, Coro Rociero, misas, entierros, catequesis niños de primera comunión, Novena de la Inmaculada, Vigilia de la Inmaculada...y en medio de todo esto: Bodas de plata del hermano de nuestro Párroco, en Alfacar. Allí, entre amigos y familiares renovaron sus promesas matrimoniales, llenos de muchísima emoción, e hicieron a todos recordar épocas pasadas de juventud, de scouts, de ligues juveniles, momentos inolvidables para todos los asistentes, en especial para D. José Luis, nuestro Párroco. Terminó todo de madrugada...y eso que el domingo, bien temprano, a las nueve, había un entierro en Íllora...así que para que luego alguno o alguna piense que los curas no hacen nada...pasen por los pueblos, que algunos curas ya no saben a dónde acudir más...son como los chicles...que se estiran, se estiran y se vuelven a estirar...
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