Como cada año, el mes de Mayo se vive intensamente en Íllora. Desde la Parroquia, que ocupa la imagen de la Virgen, el altar Mayor, pasando por la Hermandad de San Rogelio, que ha rescatado la tradición de reunirse en una casa, un numeroso grupo de personas para el rezo del Santo Rosario, hasta a nivel personal, en los hogares, dónde las imágenes de la Virgen, son adornadas con flores, y reciben el cariño y la veneración de sus moradores.
Cada tarde en la Parroquia, se reza el Santo Rosario, las oraciones propias de cada día del mes de Mayo, la Eucaristía, terminando con el canto del Regina Caeli.
Este mes, unido a nuestros más tiernos recuerdos infantiles, sigue siendo un referente para muchas personas, que también recuerdan su propia infancia, y todo lo que se organizaba desde las escuelas que había distribuidas en las casas de los maestros por el pueblo, y cómo acudían todos los alumnos, a la Iglesia, con poesías, flores, cantos, y momentos muy bellos.
También para el mes de Mayo, la Capilla de Nuestra Madre del Carmen, se ha adornado con la gratitud de muchos corazones, que en flores y en velas, quieren ofrecer a la Reina del Carmelo, lo mejor de sus vidas.
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