HORARIOS DE LAS MISAS EN LA PARROQUIA DE ÍLLORA

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DESCUBRIENDO LA SÁBANA SANTA

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CELEBRACIÓN DEL PERDÓN Y EL AMOR DE DIOS

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TRIDUO CUARESMAL DE LAS COFRADÍAS DE LA PARROQUIA DE ÍLLORA

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PREGÓN DE LA SEMANA SANTA DE ÍLLORA 2024

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A CARGO DE D. SEBASTIÁN CRESPO TORRALBA

NUESTRA MADRE DEL CARMEN DE ÍLLORA

CELEBRACIÓN VIRGEN DE LOURDES 2018 EN LA PARROQUIA DE ÍLLORA

viernes, 30 de septiembre de 2011

ORACIONES A LOS SANTOS ÁNGELES CUSTODIOS



[Angel de J. M. Strudwick]
Ángel
de J. M. Strudwick, 1895
Roy Miles Gallery, Londres
Carol Gerten's Fine Art

HIMNO DE LAUDES
AL SANTO ÁNGEL DE LA GUARDA

Ángel santo de la guarda, compañero de mi vida, tú que nunca me abandonas, ni de noche ni de día.

Aunque espíritu invisible, se que te hallas a mi lado, escuchas mis oraciones y cuenta todos mis pasos.

En las sombras de la noche, me defiendes del demonio, tendiendo sobre mi pecho tus alas de nácar y oro.

Ángel de Dios, que yo escuche tu mensaje y que lo siga, que vaya siempre contigo hacia Dios, que me lo envía.

Testigo de lo invisible, presencia del cielo amiga, gracias por tu fiel custodia, gracias por tu compañía.

En presencia de los Ángeles, suba al cielo nuestro canto: gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo. Amén.


__________

ANGEL DE DIOS

Angel de Dios, bajo cuya custodia me puso el Señor con amorosa piedad, a mí que soy vuestro encomendado, alumbradme hoy, guardadme, regidme y gobernadme. Amén.

__________

ORACIÓN AL ANGEL DE LA GUARDA
(Macario, El Egipcio)

Angel santo, que velas por mi pobre alma y por mi vida, no me dejes - soy pecador - y no me desampares a causa de mis manchas. No dejes que se me acerque el mal espíritu. Y dirígeme poderoso preservando mi cuerpo mortal.

Toma mi mano débil y condúceme por el camino de la salvación.

__________

DEVOCIÓN AL SANTO ANGEL DE LA GUARDA
(San Juan Berchmans)

Ángel Santo, amado de Dios, que después de haberme tomado, por disposición divina, bajo tu bienaventurada guarda, jamás cesas de defenderme, de iluminarme y de dirigirme: yo te venero como a protector, te amo como a custodio; me someto a tu dirección y me entrego todo a ti, para ser gobernado por ti. Te ruego, por lo tanto, y por amor a Jesucristo te suplico, que cuando sea ingrato para ti y obstinadamente sordo a tus inspiraciones, no quieras, a pesar de esto, abandonarme; antes al contrario, ponme pronto en el recto camino, si me he desviado de él; enséñame, si soy ignorante; levántame, si he caído; sosténme, si estoy en peligro y condúceme al cielo para poseer en él una felicidad eterna. Amén.

__________

ORACIÓN AL ANGEL DE LA GUARDA

[Ángel de la guarda. Estampa de finales del siglo XIX]Angel de la paz, Angel de la Guarda, a quien soy encomendado, mi defensor, mi vigilante centinela; gracias te doy, que me libraste de muchos daños del cuerpo y del alma. Gracias te doy, que estando durmiendo, me velaste, y despierto, me encaminaste; al oído, con santas inspiraciones me avisaste.

Perdóname, amigo mío, mensajero del cielo, consejero, protector y fiel guarda mía; muro fuerte de mi alma, defensor y compañero celestial. En mis desobediencias, vilezas y descortesías, ayúdame y guárdame siempre de noche y de día. Amén.

Padrenuestro y Avemaría.

-Señor, ten piedad de nosotros.
-Cristo, ten piedad de nosotros.
-Señor, ten piedad de nosotros.
-Cristo, óyenos.
-Cristo, escúchanos.
Se repite
-Dios Padre, Creador de los Angeles,
-Dios Hijo, Señor de los Angeles,
-Dios Espíritu Santo, Vida de los Ángeles,
-Santísima Trinidad, delicia de todos los Ángeles,
Ten piedad de nosotros.
-Santa María,
-Reina de todos los Ángeles,
Ruega por nosotros.
-Santos Querubines, Ángeles de la Palabra,
-Santos Tronos, Angeles de la Vida,
-Santos Ángeles de la Adoración,
-Santas Dominaciones,
-Santas Potestades,
-Santos Principados del Cielo,
-Santas Virtudes,
Rogad por nosotros.

-San Miguel Arcángel,
-Vencedor de Lucifer,
-Ángel de la fe y de la humildad,
-Preservador de la santa unción,
-Patrono de los moribundos,
-Príncipe de los ejércitos celestes,
-Compañero de las almas de los difuntos,

-San Gabriel Arcángel,
-Santo Ángel de la Encarnación,
-Fiel mensajero de Dios,
-Ángel de la esperanza y de la paz,
-Protector de todos los siervos y siervas de Dios,
-Guardián del santo Bautismo,
-Patrono de los Sacerdotes,

-San Rafael, Arcángel,
-Ángel del Amor divino,
-Vencedor del enemigo malo,
-Auxiliador en la gran necesidad,
-Ángel del dolor y de la curación,
-Patrono de los médicos, de los caminantes y de los viajeros,

Ruega por nosotros.
-Grandes Arcángeles Santos,
-Ángeles del servicio ante el trono de Dios,
-Angeles del servicio para los hombres,
-Santos Angeles Custodios,
-Auxiliadores en nuestras necesidades,
-Luz en nuestra oscuridad,
-Apoyo en todo peligro,
-Exhortadores de nuestra conciencia,
-Intercesores ante el trono de Dios,
-Escudo de defensa contra el enemigo maligno,
-Constantes compañeros nuestros,
-Segurísimos conductores nuestros,
-Fidelísimos amigos nuestros,
-Sabios consejeros nuestros,
-Ejemplos de nuestra obediencia,
-Consoladores en el abandono,
-Espejo de humildad y de pureza,
-Angeles de nuestras familias,
-Ángeles de nuestros Sacerdotes y pastores...
-Angeles de nuestros niños,
-Ángeles de nuestra tierra y Patria,
-Ángeles de la Santa Iglesia,
-Todos los Santos Angeles,
Rogad por nosotros.
-Asistidnos en la vida.
-Asistidnos en la muerte.
-En el Cielo os lo agradeceremos.
Se repite.
-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, Perdónanos, Señor.
-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, Escúchanos, Señor.
-Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, Ten piedad de nosotros.
V. Dios mandó a sus Ángeles que cuiden de ti.
R. Los cuales te guardarán en todos sus caminos

SANTO ÁNGEL CUSTODIO DE ESPAÑA

EXPLICACIÓN

Cada reino tiene su Ángel particular, y la Iglesia le dedica un culto especial. La piedad de nuestros mayores obtuvo de la santidad de León XIl, por conducto del rey de España, el que se fijara la festividad del santo Ángel de nuestra patria el día 1° de Octubre con rito doble de 2ª clase con octava, y en el hermoso oficio de este día se lee:


Tú, Señor, nos guardaras y custodiarás por medio de tu Ángel de toda prava generación, porque en rededor nuestro andan los malos. Envíanos, Señor, el auxilio angélico desde tu santuario, y desde Sion defiende nuestro Reino. Señor Dios omnipotente, edificador y guarda de la Jerusalén, ciudad celeste, envía tu Ángel para que guarde este lugar y este Reino con todos sus habitadores. No se adormirá, no, el Ángel que guarda este Reino.

Estas y otras tiernas súplicas y alabanzas dirige la Iglesia en la festividad del santo Ángel, y que parecen inspiradas principalmente para las necesidades de nuestros días. No desmerezcamos, por lo tanto, la eficaz protección de nuestro cariñoso Patrono, que tan necesaria nos es en las tristes circunstancias que atraviesa nuestra patria, y ante las mas azarosas que la amenazan. ¡Cuán provechoso nos seria si, al invocar al Ángel de la Guarda cuando nos levantamos, dirigiéramos también una mirada de confianza a ese Guardián' de nuestra patria, saludándole a lo menos con esta jaculatoria: "Santo Ángel, patrono de España, rogad por nosotros!" Acudamos asimismo a él en los peligros de nuestra nació.

Pero no descuidemos sobre todo el celebrar su fiesta, uniendo en este día nuestras oraciones a las de la Iglesia, ofreciéndole nuestros homenajes como un tributo de amor y gratitud, y también de reparación por la indiferencia de tantos corazones confiados a su cuidado, y por nuestro olvido para con él hasta el presente.

Corazón de Jesús, apresurad vuestro reinado en España.
Virgen Inmaculada, Santiago Apóstol, santa Teresa de Jesús y Santo Ángel, patronos de España, conservad la fe y la unidad católica en nuestra patria.


Escasamente conocida y difundida en la actualidad, parece que su fiesta se remonta a tiempos del rey Fernando VII. Fue especialmente promovida por el Beato Manuel Domingo y Sol (1836-1909) con la impresión de estampas como la que se muestra en esta página, y cuyo texto y oración también se reproducen aquí. Inicialmente la festividad se celebraba el 1 de octubre, pero tras el Concilio Vaticano II fue trasladada al 2 de octubre, festividad de los santos Ángeles Custodios.

ORACIÓN AL SANTO ANGEL
CUSTODIO DE ESPAÑA
[Ir al principio de esta página]

Oh, bienaventurado espíritu celestial, a quien la Divina Misericordia se ha dignado confiar el glorioso Reino de España, para que lo defiendas y custodies; postrados ante ti y en amorosa unión contigo damos al Señor humildes y fervientes gracias por haber tenido para con nosotros la misericordiosa providencia de ponernos bajo tu protección; contigo le alabamos y bendecimos y a su divino servicio rendidamente nos ofrecemos.

Acepta, Ángel Santo, estos piadosos cultos que a tu honor dedicamos, ilumina nuestras inteligencias, conforta nuestras voluntades, presenta al Señor nuestras plegarias avaloradas con las tuyas; defiéndenos del enemigo de nuestras almas, que también lo es, y muy feroz, de nuestra Patria; alcánzanos del Señor que saquemos fruto y provecho espiritual de estos cultos, que crezcamos en la veneración a ti, en tu amor y en la docilidad a tus enseñanzas y dirección para que defendidos, custodiados y regidos por ti sirvamos fidelísimamente a Dios en nuestra vida privada y pública; para que se salven muestras almas y las de nuestros compatriotas todos; para que España sea siempre el paladín de la Fe Católica y Dios Nuestro Señor la bendiga, prospere y glorifique. Amén.



EL 2 DE OCTUBRE ES EL DÍA DE LOS SANTOS ÁNGELES CUSTODIOS





Desde la infancia a la muerte, la vida de humana esta rodeada de su custodia. "Cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor para conducirlo a la vida". Desde esta tierra, la vida cristiana participa, por la fe, en la sociedad bienaventurada de los ángeles y de los hombres, unidos en Dios. CIC 336

La vida humana comienza en el momento de la concepción. Es en ese momento que Dios crea nuestra alma y se deduce que es entonces cuando se nos asigna el ángel custodio. Los ángeles custodios están encargados de velar por cada uno de nosotros, protegiéndonos de los peligros y alentando nuestra vida en Cristo. Deberíamos ser agradecidos con nuestro ángel e invocar su protección y guía.

Fundamentos Bíblicos:
Exodo 23, 20-23a: Así habla el Señor: «Yo voy a enviar un ángel delante de ti, para que te proteja en el camino y te conduzca hasta el lugar que te he preparado. Respétalo y escucha su voz. No te rebeles contra él, porque no les perdonará las transgresiones, ya que mi Nombre está en él. Si tú escuchas realmente su voz y haces todo lo que yo te diga, seré enemigo de tus enemigos y adversario de tus adversarios. Entonces mi ángel irá delante de ti.»

Mateo 18,10: Guardaos de menospreciar a uno de estos pequeños; porque yo os digo que sus ángeles, en los cielos, ven continuamente el rostro de mi Padre que está en los cielos.

San Basilio: "Todo fiel tiene junto a sí un ángel como tutor y pastor, para llevarlo a la vida" (cf. San Basilio, Adv, Eunomium, III, 1; véase también Santo Tomás, S. Th., I, q. 11, a. 3).

La Iglesia recomienda el recurso a su protección.
La Iglesia celebra la fiesta de los ángeles custodios desde el Siglo XVII. Fue instituida por el Papa Clemente X.

Muchos santos han dado testimonio de una bella relación con sus ángeles custodios:
Sta. Francisca Romana veía a su ángel custodio

Oración
Angel santo de la guarda,
compañero de mi vida,
tú que nunca me abandonas,
ni de noche ni de día.

Aunque espíritu invisible,
sé que te hallas a mi lado,
escuchas mis oraciones
y cuentas todos mis pasos.

En las sombras de la noche,
me defiendes del demonio,
tendiendo sobre mi pecho
tus alas de nácar y oro.

Angel de Dios, que yo escuche
tu mensaje y que lo siga,
que vaya siempre contigo
hacia Dios, que me lo envía.

Testigo de lo invisible,
presencia del cielo amiga,
gracias por tu fiel custodia,
gracias por tu compañía.

En presencia de los ángeles,
suba al cielo nuestro canto:
gloria al Padre, gloria al Hijo,
gloria al Espíritu Santo. Amén.

Himno de la Liturgia de las Horas


El Catecismo de la Iglesia Católica
Los ángeles #328-336:

La existencia de los ángeles, una verdad de fe.

328 La existencia de seres espirituales, no corporales, que la Sagrada Escritura llama habitualmente ángeles, es una verdad de fe. El testimonio de la Escritura es tan claro como la unanimidad de la Tradición.

Quiénes son los ángeles

329 San Agustín dice respecto a ellos: "Angelus officii nomen est, non naturae. Quaeris nomen huius naturae, spiritus est; quaeris officium, angelus est: ex eo quod est, spiritus est, ex eo quod agit, angelus" ("El nombre de ángel indica su oficio, no su naturaleza. Si preguntas por su naturaleza, te diré que es un espíritu; si preguntas por lo que hace, te diré que es un ángel"). Con todo su ser, los ángeles son servidores y mensajeros de Dios. Porque contemplan "constantemente el rostro de mi Padre que está en los cielos" (Mt 18, 10), son "agentes de sus órdenes, atentos a la voz de su palabra" (Sal 103, 20).

330 En tanto que criaturas puramente espirituales, tienen inteligencia y voluntad: son criaturas personales e inmortales. Superan en perfección a todas las criaturas visibles. El resplandor de su gloria da testimonio de ello. Cristo "con todos sus ángeles"

331 Cristo es el centro del mundo de los ángeles. Los ángeles le pertenecen: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles... (Mt 25, 31). Le pertenecen porque fueron creados por y para El: "Porque en él fueron creadas todas las cosas, en los cielos y en la tierra, las visibles y las invisibles, los Tronos, las Dominaciones, los Principados, las Potestades: todo fue creado por él y para él" (Col 1, 16).

Le pertenecen más aún porque los ha hecho mensajeros de su designio de salvación: "¿Es que no son todos ellos espíritus servidores con la misión de asistir a los que han de heredar la salvación?" (Hb 1, 14).

332 Desde la creación y a lo largo de toda la historia de la salvación, los encontramos, anunciando de lejos o de cerca, esa salvación y sirviendo al designio divino de su realización: cierran el paraíso terrenal protegen a Lot, salvan a Agar y a su hijo, detienen la mano de Abraham, la ley es comunicada por su ministerio (cf Hch 7, 53), conducen el pueblo de Dios, anuncian nacimientos y vocaciones, asisten a los profetas, por no citar más que algunos ejemplos. Finalmente, el ángel Gabriel anuncia el nacimiento del Precursor y el de Jesús.

333 De la Encarnación a la Ascensión, la vida del Verbo encarnado está rodeada de la adoración y del servicio de los ángeles. Cuando Dios introduce "a su Primogénito en el mundo, dice: `adórenle todos los ángeles de Dios'" (Hb 1, 6). Su cántico de alabanza en el nacimiento de Cristo no ha cesado de resonar en la alabanza de la Iglesia: "Gloria a Dios... (Lc 2, 14). Protegen la infancia de Jesús, sirven a Jesús en el desierto, lo reconfortan en la agonía, cuando El habría podido ser salvado por ellos de la mano de sus enemigos como en otro tiempo Israel. Son también los ángeles quienes "evangelizan" (Lc 2, 10) anunciando la Buena Nueva de la Encarnación, y de la Resurrección de Cristo. Con ocasión de la segunda venida de Cristo, anunciada por los ángeles, éstos estarán presentes al servicio del juicio del Señor.

Los ángeles en la vida de la Iglesia

334 De aquí que toda la vida de la Iglesia se beneficie de la ayuda misteriosa y poderosa de los ángeles.

335 En su liturgia, la Iglesia se une a los ángeles para adorar al Dios tres veces santo; invoca su asistencia (así en el "Supplices te rogamus..." ["Te pedimos humildemente..."] del Canon romano o el "In Paradisum deducant te angeli..." ["Al Paraíso te lleven los ángeles..."] de la liturgia de difuntos, o también en el "Himno querúbico" de la liturgia bizantina) y celebra más particularmente la memoria de ciertos ángeles (san Miguel, san Gabriel, san Rafael, los ángeles custodios).

336 Desde la infancia a la muerte, la vida humana está rodeada de su custodia y de su intercesión. "Cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor para conducirlo a la vida". Desde esta tierra, la vida cristiana participa, por la fe, en la sociedad bienaventurada de los ángeles y de los hombres, unidos en Dios.


Los Nueve Coros de ángeles. Jerarquía

Desde el Seudo Dionisio (siglo VI), Padre de la Iglesia, suelen enumerarse tres jerarquías con tres coros cada una, sumando un total de nueve Coros u Ordenes Angélicos.

Primera Jerarquía (Estos ángeles de la mas alta jerarquía se dedican exclusivamente a glorificar, amar y alabar a Dios en su presencia).
Serafines, Querubines y Tronos.

Segunda Jerarquía
Dominaciones, Virtudes y Potestades (gobiernan el espacio y las estrellas. Son los responsables del universo entero).


Tercera Jerarquía
Principados,
Arcángeles y Ángeles. Son los que intervienen en todas nuestras necesidades; esto lo vemos también en la Biblia, cuando se nos presenta la intervención de los arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael, vemos que directamente intervienen en la vida de los hombres, cada uno con su propia misión dada por el mismo Dios. También se les ha dado la misión de proteger naciones, ciudades e Iglesias. La visión del profeta Daniel es la que confirma esta misión. (Dn 7 y 8) El cuidado de la Iglesias se confirma con el pasaje de Ap. 1:20 cuando se refiere a los Ángeles de las siete Iglesias.

Algunos autores y Místicos, dividen a los ángeles entre asistentes al Trono Divino, y Mensajeros de Dios para cumplir diversas misiones por encargo suyo. Así por ejemplo, el Libro de Tobías tiene como personaje central al Arcángel Rafael, el cual desempeña un oficio protector admirable y nos muestra el Amor de Dios manifestado en el ministerio de los Ángeles: "Yo soy Rafael, uno de los siete Santos Ángeles que presentamos las oraciones de los justos y tiene entrada ante la majestad del Santo" (To. 12,15).

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Todo lo que hablemos de Santa Teresita, de su humildad, del camino de infancia espiritual, del gran ejemplo que es ella para todos los jóvenes, nunca será capaz de expresar todo lo que ella significa en la vida de la Iglesia, y de la invitación que nos hace a vivir del amor de Dios. Que estos videos nos ayuden a descubrir la presencia de Dios en nuestra vida.



ORACIONES A SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS

TOMADO DE LA PÁGINA: http://www.devocionario.com/santos/lisieux_2.html


  • Festividad: 1 de octubre
  • Doctora de la Iglesia
  • Fecha de canonización: 17 mayo de 1925 por el Papa Pío XI
  • Nacionalidad: francesa
  • Patrona: misiones de Africa, enfermos de SIDA, pilotos de aviación, floristas, jardineros, Francia, enfermos, misiones en general, restauración de la libertad religiosa en Rusia, Rusia.
(Fuente: Patron Saints Index)
[Fotografía de Santa Teresa de Lisieux]



ORACIÓN PARA PEDIR UN FAVOR

¡Santa Teresita! Vengo a tus plantas lleno de confianza a pedirte favores. La Cruz de la vida me pesa mucho y no encuentro más que espinas entre sus brazos. ¡Florecitas de Jesús! Envía sobre mi alma una lluvia de flores de gracia y de virtud, para que pueda subir el Calvario de la vida embriagado en sus perfumes. Mándame una sonrisa de tus labios de cielo y una mirada de tus hermosos ojos... Que valen más tus caricias que todas las alegrías que el mundo encierra. ¡Dios mío! Por intercesión de Santa Teresita dáme fuerza para cumplir con mi deber y concédeme la gracia que en esta oración te pido.

Amén

__________

POR LAS MISIONES

Oh Santa Teresita del Niño Jesús, que has sido justamente proclamada Patrona de las Misiones de todo el mundo: acuérdate de los ardentísimos deseos de mostrarte, cuando vivías en la tierra, de querer plantar la Cruz de Jesucristo en todas las naciones, y anunciar el Evangelio hasta la consumación de los siglos. Te suplicamos que ayudes, según tu promesa, a los sacerdotes, a los misioneros y a toda la Iglesia. Así sea.

Santa Teresita del Niño Jesús ¡Ruega por nosotros!

__________

ORACIÓN

Oh bienaventurada Santa Teresita del Niño Jesús, que habéis prometido hacer caer una lluvia de rosas, desde el cielo, dirigid a mí vuestros ojos misericordiosos y escuchadme en mis múltiples necesidades. Grande es vuestro poder porque Dios os ha hecho grande entro los santos del cielo.

Os suplico, pues, oh mi amable protectora, me alcancéis de Dios las gracias que os pido, siempre que sea para mayor honra de Dios y salvación de mi alma. Os suplico de un modo especial que me hagáis participar de las rosas que nos habéis prometido, apartando mi corazón de las vanidades y placeres caducos de esta vida, y enseñándome a amar a Jesús y a María con amor verdadero, para que así pueda un día gozar con vos de la eterna bienaventuranza. Así sea.

V. Rogad por nosotros, oh bienaventurada Santa Teresita
R. Para que seamos dignos de la lluvia de rosas que nos habéis prometido.

SANTA TERESA DEL NIÑO JESÚS
( LISIEUX )
1873-1897
TRIDUO

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[Santa Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz. Fotografía]
Última foto tomada a S. Teresa por su hermana el 7 de Junio de 1897. En ella aparece sosteniendo las imágenes del Niño Jesús y de la Santa Faz. Murió el 30 de septiembre de 1897.
Por la señal...
Acto de contrición...
ORACIÓN INICIAL

¡Jesús amantísimo que viniste al mundo en busca de las almas y en todos los siglos haces brotar en los vergeles de la Iglesia flores de santidad! ¡Cuán admirable y digna de todo agradecimiento es tu providencia para con el Carmelo en cuya mística montaña nació Santa Teresita y floreció en virtudes y desde donde, como faro de salvación, nos guía enseñándonos su caminito de infancia espiritual!

No sólo las almas piadosas y las que se santifican en los claustros van tras el olor de sus perfumes y siguen la luz de sus ejemplos y enseñanzas, sino hasta las que nacieron en la infidelidad, las que renegaron del cristianismo o dormitan en la indiferencia..., todas aman a Teresita, deslumbradas por la luz de sus milagros y agradecidas a su lluvia de gracias. Al glorificar su nombre, te bendecimos, dulcísimo Redentor, por esta obra maravillosa de tu gracia y al invocarla en este Triduo, sed benévolo a nuestras súplicas para obtener la imitación de sus virtudes y, mediante ellas, la participación de tu gloria en los cielos. Amén.

Rezar a continuación la oración del día que corresponda:
DÍAS
1 | 2 | 3

DÍA PRIMERO [Ir al principio de esta página]

Predestinación de Santa Teresita

¡Angelical Santa Teresita del Niño Jesús! ¡Cuán bien supiste comprender la providencia y el amor a Jesús al escogerte entre las predestinadas para el cielo, viendo claramente "el misterio de tu Vocación" y más que nada "el misterio de los privilegios" que Jesús se dignó conceder a tu alma!

Leyendo tu vida se siente palpable la realidad de la vida sobrenatural; la historia de tu alma es un eco de tu vocación al cielo y en tus intimidades con Jesús, que tan delicadamente relatas, se siente una imantación irresistible hacia El Amor de los amores y Esposo de todas las almas; hasta soñando pensabas en Jesús y creías ver escrito tu nombre en el cielo. No conociste al mundo y tuviste sólo tus delicias en la lectura de los libros santos, en las visiones y sonrisas de la Virgen María, en las hablas intimas con Jesús, en el celo y oración por la conquista de las almas y cifraste tu bienaventuranza en vivir siempre en la tierra haciendo bien, como el Divino Maestro.

En esa predilección por tu alma y en tu correspondencia a las gracias con que fue enriquecido está el secreto de tu predestinación.

Haz, celestial protectora mía, que sea fiel a todas las santas inspiraciones para salvarme y glorificar así la sangre redentora de Jesús. Amén. Concluir con las oración final.

__________

DÍA SEGUNDO [Ir al principio de esta página]

Santificación de Santa Teresita

¡Oh Santa Teresita del Niño Jesús, que jamás negaste a Jesús cosa alguna, y, como alma gigante, fue tu ideal de por vida llegar a ser una gran santa! ¡Qué aprecio de todas las obras buenas! ¡Qué preparación para recibir los Santos Sacramentos! Cuán diligente en el amor a María, cuán activa por ingresar en los claustros teresianos, lejos del mundo y con inflamadas ansias de sacrificio. Fuiste tan amadora de Jesús que por verle servido y glorificado en todas partes y pensando que de los abismos del infierno no subiría jamás hasta El ni un solo acto de amor, deseaste de buena gana verte sumergida en aquel lugar de tormentos y blasfemias para que allí fuera eternamente amado.

¡Qué anhelos de santificación tan encendidos al escoger para tu ideal de santa la vida de todos los santos y vírgenes, el mismo martirio y todos los géneros de suplicio, no tan sólo deseados, sino padecidos por amor a Jesús. "Abrid, Jesús mío, el libro de la Vida donde están consignadas todas las acciones de vuestros santos -escribe en la Historia de un alma-: todas ellas quisiera haberlas llevado a cabo por vuestro amor.

Admiro, celestial Santa Teresita, tu gran amor y al sentirme animado por tu ideal, te ruego sea yo una de aquella legión de almas que suplicabas a Jesús las hiciese pequeñas victimas dignas de su amor; que, como tú, presienta por mi endiosamiento la hora de volar al cielo para amar a Jesús sin fin y gozarme en su gloria. Así sea. Concluir con las oración final.

__________

DÍA TERCERO [Ir al principio de esta página]

Glorificación de Santa Teresita

Dios ha bendecido, gloriosa Santa Teresita, tu ideal de santidad. Pasaste por la tierra con alas de ángel y tras una vida breve, se dignó glorificarte como a los santos más encumbrados, otorgándote el don de milagros, la protección más universal y decidida sobre cuantos te invocan y una atracción sobrenatural e irresistible para cuantos contemplan tu imagen y leen tu Vida.

En este siglo de olvido casi absoluto del cielo, de desprecio de las cosas santas, de desconfianza y aun negación del mundo sobrenatural crió Dios esta alma, entre cuyas virtudes las más admirables son la vida de fe, la práctica y aprecio de las obras piadosas más insignificantes y el abandono total en Jesús para que El, tan amante de las almas como cuando vivía en la tierra, la acaricie con amor como a niño inocente, con ella tenga sus complacencias y cumpla su promesa de otorgarla el cielo.

Dígnate, angelical Santa Teresita, infundirnos tu espíritu y hacernos merecedores de tu protección. Que sepamos amar a Jesús y gustar de sus intimidades; cargar con su cruz en la tierra para cantar eternamente sus infinitas misericordias. Amén. Concluir con las oración final.

ORACIÓN FINAL

¡Amabilísima Santa Teresita del Niño Jesús! Al celebrar tu gloria, bendecimos a Dios por su providencia en predestinarte y ofrecer al mundo tu vida como ejemplar de virtudes heroicas para animar a cuantos, camino del Cielo, sienten desaliento y cautivar a los que no gustan de las cosas divinas.

Agradecidas acuden a tu altar todas las almas, viendo que, conforme a tu promesa, no permaneces inactiva en el cielo, sino que haces descender la lluvia de rosas y gracias y tanto favoreces a los que te invocan que, fiel a tu palabra, tienes tu cielo en la tierra, haciendo bien.

Sigue, celestial Santa Teresita, favoreciéndonos; bendice en especial a cuantos pertenecen a tu Pía Unión; haz que en las tierras de la infidelidad alumbre la luz cristiana, para que todos podamos gozarnos un día eternamente en el amor y en la presencia de Jesús. Amén.

2. NOVENA


[Estampa de Santa Teresa de Lisieux] Versión PDF para imprimir folleto tríptico
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ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

¡Santa Teresita! Vengo a tus plantas lleno de confianza a pedirte favores. La cruz de la vida me pesa mucho, y no encuentro más que espinas entre sus brazos. ¡Florecita de Jesús! envía sobre mi alma una lluvia de flores de gracia y de virtud para que pueda subir el Calvario de la vida embriagado en sus perfumes. Mándame una sonrisa de tus labios de cielo y una mirada de tus hermosos ojos... Que valen más tus caricias que todas las alegrías que el mundo encierra. ¡Dios mío! Por intercesión de Santa Teresita dadme fuerza para cumplir exactamente con mi deber, y concededme la gracia que en esta novena le pido. Amén.


Rezar a continuación la oración del día que corresponda:

DÍAS
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9
ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS

Jaculatoria. ¡Oh santita sin igual! Enséñanos el "caminito" de tu infancia espiritual.

Oración. ¡Gloriosa santita mía! Espero confiadamente me alcanzarás de Dios la gracia especial que en esta novena te pido. Yo en cambio, prometo imitar, con todas mis fuerzas, tus heroicos ejemplos, y apropiarme de las páginas de tu vida encantadora para que tenga la dicha de gozar de Dios en tu compañía en la patria de los santos. En tanto, quiero, cual tu, oh Florecita de Jesús, "deshojar" en la tierra las flores de mis caricias a los pies del Amor de los Amores y cantar a lo divino tus encantadoras armonías:

"Por solo tus amores,
Jesús mi bien amado,
En ti mi vida puse,
mi gloria y porvenir;
Y ya que para el mundo
soy una flor marchita,
No tengo más anhelo
que amándote, morir…"

DÍA PRIMERO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por aquel volcán de amores que inflamó tu corazón, cuyos divinos ardimientos fueron el dulce martirio que consumió tu vida "con ansias de amores inflamada", haz que también yo, ¡oh santa Teresita! a solo Dios entregue totalmente mi corazón con todas sus esperanzas y con todos sus ensueños, para que le transforme y le resucite y le salve. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

__________

DÍA SEGUNDO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por los perfumes de santidad que exhalaste durante tu vida, escondida cual humilde violeta en el jardín del Carmelo, haz que pueda también mi alma, libre de los malos olores del pecado, agradar a Dios con el suave olor de las virtudes cristianas. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

__________

DÍA TERCERO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por los pasos de inocencia y de candor que diste en la florida senda de tu caminito, que fue camino de infancia espiritual, haz que los pasos de mi vida no corran por los derroteros de la perdición; sino que, pasito a paso, suba la senda -cuesta arriba- que conduce a la gloria. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

__________

DÍA CUARTO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por la celestial pureza que adornó tu corazón cual los lirios a los valles y la "nieve" a las alturas alcánzame, azucena del Carmelo, la pureza en pensamientos, palabras y obras. Defiéndeme en la tentación, y cubre con las azucenas de tu pureza la fealdad de éste pobre corazón mío inquieto y apasionado. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

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DÍA QUINTO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por el empeño grande que pusiste en "pasar por la Tierra haciendo bien", y en esparcir en los corazones el amor y la esperanza, haz que también yo pase mi vida sembrando bondades para recibir allá arriba el galardón seguro del ciento por uno con la vida perdurable y feliz. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

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DÍA SEXTO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por aquella continua tendencia de "empequeñecerse" que fue el tema de tu santa vida, haz sepa también yo ser un "alma tan pequeñita" que encuentre la verdadera grandeza en los brazos del sacrificio y de la Cruz; y aprenda a ser grande en lo pequeño y amar la humildad... la "pequeñez", para entrar más fácilmente por las puertas de la gloria al gozo eterno. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

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DÍA SÉPTIMO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por aquel martirio tan continuado que sufrió tu espíritu en la incesante negación de la naturaleza, haz que aprenda a negar mis caprichos y veleidades y a pagar, cual tú, los desprecios del prójimo con una sonrisa heroica y celestial. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

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DÍA OCTAVO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por la paciencia admirable con que supiste disimular y sufrir las enfermedades que en la Cruz te pusieron, ¡oh! que pueda yo también, santita mía, llevar si no con alegría, a lo menos en conformidad con la voluntad de Dios los achaques y miserias de este cuerpo de barro para que un día resulte embellecido en la gloria. Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

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DÍA NOVENO [Ir al principio de esta página]

Comenzar con la oración de todos los días.

Oración. ¡Florecita de Jesús! Por el heroico valor con que apuraste el cáliz hasta las "heces" en el trance amargo de tu agonía; y por la dulce calma con que esperaste la fría llamada de la muerte, pueda yo también cerrar los ojos a esta vida mortal repitiendo las hermosas palabras que al morir pronunciaste: "Oh... ¡Le amo!.. . ¡Dios mío... os...amo!". Amén.

Petición. Tres Avemarías, jaculatoria y oración final de todos los días.

1 DE OCTUBRE: SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS.




Doctora de la Iglesia y patrona de las misiones

Por SCTJM


"En el Corazón de la Iglesia, que es mi madre, yo seré el AMOR" (Santa Teresita de Lisieux)


Biografía
Santa Teresa del Niño Jesús nació en la ciudad francesa de Alençon, el 2 de enero de 1873, sus padres ejemplares eran Luis Martin y Acelia María Guerin, ambos venerables. Murió en 1897, y en 1925 el Papa Pío XI la canonizó, y la proclamaría después patrona universal de las misiones. La llamó «la estrella de mi pontificado», y definió como «un huracán de gloria» el movimiento universal de afecto y devoción que acompañó a esta joven carmelita. Proclamada "Doctora de la Iglesia" por el Papa Juan Pablo II el 19 de Octubre de 1997 (Día de las misiones)

«Siempre he deseado, afirmó en su autobiografía Teresa de Lisieux, ser una santa, pero, por desgracia, siempre he constatado, cuando me he parangonado a los santos, que entre ellos y yo hay la misma diferencia que hay entre una montaña, cuya cima se pierde en el cielo, y el grano de arena pisoteado por los pies de los que pasan. En vez de desanimarme, me he dicho: el buen Dios no puede inspirar deseos irrealizables, por eso puedo, a pesar de mi pequeñez, aspirar a la santidad; llegar a ser más grande me es imposible, he de soportarme tal y como soy, con todas mis imperfecciones; sin embargo, quiero buscar el medio de ir al Cielo por un camino bien derecho, muy breve, un pequeño camino completamente nuevo. Quisiera yo también encontrar un ascensor para elevarme hasta Jesús, porque soy demasiado pequeña para subir la dura escalera de la perfección».

Teresa era la última de cinco hermanas - había tenido dos hermanos más, pero ambos habían fallecido - Tuvo una infancia muy feliz. Sentía gran admiración por sus padres: «No podría explicar lo mucho que amaba a papá, decía Teresa, todo en él me suscitaba admiración».

Cuando sólo tenía cinco años, su madre murió, y se truncó bruscamente su felicidad de la infancia. Desde entonces, pesaría sobre ella una continua sombra de tristeza, a pesar de que la vida familiar siguió transcurriendo con mucho amor. Es educada por sus hermanas, especialmente por la segunda; y por su gran padre, quien supo inculcar una ternura materna y paterna a la vez.

Con él aprendió a amar la naturaleza, a rezar y a amar y socorrer a los pobres. Cuando tenía nueve años, su hermana, que era para ella «su segunda mamá», entró como carmelita en el monasterio de la ciudad. Nuevamente Teresa sufrió mucho, pero, en su sufrimiento, adquirió la certeza de que ella también estaba llamada al Carmelo.
Durante su infancia siempre destacó por su gran capacidad para ser «especialmente» consecuente entre las cosas que creía o afirmaba y las decisiones que tomaba en la vida, en cualquier campo. Por ejemplo, si su padre desde lo alto de una escalera le decía: «Apártate, porque si me caigo te aplasto», ella se arrimaba a la escalera porque así, «si mi papá muere no tendré el dolor de verlo morir, sino que moriré con él»; o cuando se preparaba para la confesión, se preguntaba si «debía decir al sacerdote que lo amaba con todo el corazón, puesto que iba a hablar con el Señor, en la persona de él».

Cuando sólo tenía quince años, estaba convencida de su vocación: quería ir al Carmelo. Pero al ser menor de edad no se lo permitían. Entonces decidió peregrinar a Roma y pedírselo allí al Papa. Le rogó que le diera permiso para entrar en el Carmelo; el le dijo: «Entraréis, si Dios lo quiere. Tenía ‹dice Teresa‹ una expresión tan penetrante y convincente que se me grabó en el corazón».

En el Carmelo vivió dos misterios: la infancia de Jesús y su pasión. Por ello, solicitó llamarse sor Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz. Se ofreció a Dios como su instrumento. Trataba de renunciar a imaginar y pretender que la vida cristiana consistiera en una serie de grandes empresas, y de recorrer de buena gana y con buen ánimo «el camino del niño que se duerme sin miedo en los brazos de su padre».

A los 23 años enfermó de tuberculosis; murió un año más tarde en brazos de sus hermanas del Carmelo. En los últimos tiempos, mantuvo correspondencia con dos padres misioneros, uno de ellos enviado a Canadá, y el otro a China, y les acompañó constantemente con sus oraciones. Por eso, Pío XII quiso asociarla, en 1927, a san Francisco Javier como patrona de las misiones.

Por Coro Marín, «Alfa y Omega»



Santa Teresita de Lisieux
Por Mons. Guy Gaucher, obispo auxialiar de Bayeux y Lisieux

La santidad de Santa Teresita no se basa en fenómenos extraordinarios. Se basa en "hacer de manera extraordinaria las cosas más ordinarias y corrientes".

Cuesta entender que la vida de Teresa Martín fuera completamente corriente porque para nosotros, Teresa Martín es hoy Santa Teresita del Niño Jesús y de la Santa Faz, conocida en el mundo entero, Patrona universal de las Misiones, Patrona de Francia junto a Santa Juana de Arco, Doctora de la Iglesia, etc. Pero olvidamos que pasó inadvertida para su familia, para su entorno, para el Carmelo e incluso para su padre espiritual. Ciertamente que en Lisieux se comentó que había tenido la audacia de hablar al Papa León XIII en una audiencia en Roma (un periódico nacional se hizo eco de la noticia). También se comentó que había entrado en el Carmelo a los quince años y tres meses. Pero, cuando murió desconocida en un pequeño Carmelo de Provincias, no había más de treinta personas en su entierro en el cementerio de Lisieux. Sin embargo, a su canonización en S. Pedro de Roma asistirán más de 500.000 el 17 de mayo de 1925.

¿Entonces?… Sí, una vida muy ordinaria y muy escondida.

Alençon
(1873-1877)

Una familia cristiana en Alençon, El padre, Luis Martin, relojero-joyero, la madre, Celia Guerin, encajera. Han tenido nueve hijos de los cuales cuatro han muerto a temprana edad. Quedan cuatro hijas y he aquí que, a los cuarenta años, la madre está encinta. Teresa nace el 2 de enero de 1873. Niña alegre, vivaracha, permanece un año con Rosita Taillé, su nodriza, en Semallé (su madre no puede darle el pecho). Su vida es dichosa, llena del amor de sus padres y hermanas. La pequeña y última hija recibe de toda la familia una fe profunda, viva, generosa y llena de caridad. Todo va bien hasta que surge el drama : la madre, Celia Guerin, muere de un cáncer de pecho. Teresa tiene cuatro años y medio.

El golpe es muy fuerte para la pequeña que escoge a su hermana Paulina como su segunda madre, pero la herida es profunda y tardará diez años en cicatrizar.
Lisieux (1877-1888)
Con cinco hijas que educar, el Sr. Martin cede a los ruegos insistentes de su cuñado, Isidoro Guerin, farmacéutico en Lisieux. Toda la familia Martin se instala en Los Buissonnets. Teresa encuentra allí una ambiente cálido, pero los cinco años que va al colegio de la abadía de las Benedictinas, serán para ella "los cinco años más tristes de su vida". Buena alumna pero tímida, escrupulosa, sufre con los contratiempos de la vida escolar...

La entrada de Paulina en el Carmelo de Lisieux vuelve a abrir la herida. A los diez años, Teresa cae gravemente enferma : síntomas alarmantes de una regresión infantil, alucinaciones, anorexia. La medicina no puede hacer nada. Los familiares y el Carmelo rezan. El 13 de mayo de 1883, una imagen de la Virgen María sonríe a Teresa que es curada súbitamente.

Al año siguiente, el 8 de junio, su primera Comunión es para ella una "fusión" de amor. Jesús se entrega al fin a ella y ella se entrega a Èl. Piensa ya en ser carmelita. La entrada en el Carmelo de su tercera madre, su hermana María, la desestabiliza. Sufre una grave crisis de escrúpulos obsesivos, está hipersensible y "llora en exceso". Desea morir y ser liberada. Al volver de la misa del Gallo el año 1886, la gracia toca su corazón. Es una verdadera conversión que la transforma en una mujer fuerte. El Niño del pesebre, el Verbo de Dios le ha comunicado su fuerza en la Eucaristía.

Está decidida a luchar para entrar en el Carmelo, para salvar todos los obstáculos : su padre, su tío, el superior del Carmelo, el obispo, el Papa León XII, pues la gracia le ha abierto el corazón y quiere salvar a los pecadores con Jesús que, en la Cruz, tuvo sed de almas. Teresa, a los catorce años y medio, decide permanecer siempre al pie de la Cruz para recoger la sangre divina y dársela a las almas". Tal es su vocación de "amar a Jesús y hacerlo amar".

El 1887, al oír hablar de un asesino que ha dado muerte a tres mujeres en París, reza y se sacrifica por él queriendo, a todo precio, arrancarlo del infierno. Henri Pranzini es juzgado y condenado a morir guillotinado pero, en el momento de morir, besa el crucifijo. Teresa llora de alegría : su oración ha sido escuchada. Lo llama su primer hijo.

En su peregrinación a Italia Teresa se da cuenta de que, a pesar de lo "sublime de su vocación", los sacerdotes tienen pequeñas debilidades. Piensa que hace falta rezar mucho por ellos, porque son hombres "débiles y frágiles". Teresa comprende que su vocación no consistirá sólo en orar por la conversión de los grandes pecadores, sino también en rezar por los sacerdotes. En el curso de esta peregrinación pide al Papa poder entrar en el Carmelo a los quince años. Respuesta evasiva, "un fiasco", pero el 9 de abril de 1888, Teresa deja para siempre a su padre, a sus hermanas, a su familia, los Buissonnets, a su perro Tom…

En el Carmelo Un camino de soledad
(1888-1897)

Se siente feliz al estar para siempre en el Carmelo, "prisionera" con Èl… y con 24 hermanas. La vida comunitaria, el frío la oración a menudo en sequedad, la soledad afectiva (aunque esté con sus dos hermanas mayores). Todo lo soporta con ilusión. Su más grande sufrimiento será la enfermedad de su amado padre, internado en El Buen Salvador de Caen, hospital para enfermos mentales. Nuevo drama familiar para Teresa que profundiza en la oración con "el Siervo doliente" de Isaías, 53, en la Pasión de Jesús. Pero el clima espiritual de su Carmelo, marcado por el temor a un Dios a quien se ve sobre todo como un Dios justo, le pesa. Aspira al amor cuando lee la "Llama de amor viva" de S. Juan de la Cruz. En 1891 -- tiene 18 años - un sacerdote la lanza "sobre las olas de la confianza y del amor" sobre las cuales no se atrevía a avanzar, retenida en este camino audaz, incluso por su hermana Paulina, la Madre Inés de Jesús que será elegida priora el 1893.

Su padre, que había regresado con su familia desde el Buen Salvador de Caen, muere en 1894 : Celina, que le había cuidado, entra en el Carmelo.
En esta época es cuando la joven hermana Teresa del Niño Jesús de la Santa Faz (tal es su verdadero nombre, resumen de su vocación) descubre, después de años de búsqueda, el camino que va a transformar su vida. Teresa recibe la gracia de profundizar en la Paternidad de Dios que nos es otra coas que Misericordia y Amor (expresadas en su Hijo Jesús, hecho hombre. La vida cristiana no es otra cosa que la vida de un hijo del Padre - hijo en el Hijo - inagurada en el bautismo y vivida en una confianza absoluta. "Si no volvéis a ser como niños no entraréis en el reino de los cielos" (Mt 18, 3). Por suerte, M. Inés de Jesús le ordena escribir sus recuerdos de infancia. Teresa obedece y escribe 86 páginas en un cuadernito.
En su tiempo, algunas almas escogidas se ofrecían como víctimas a la Justicia divina. La "débil e imperfecta Teresa" se ofrece al Amor Misericordioso el día 9 de junio, en la misa de la Santísima Trinidad.

Este don total "la renueva", quema todo pecado en ella. En septiembre de 1896, Teresa experimenta que su hermosa vocación ("carmelita, esposa y madre") no le basta. En sus oraciones siente grandes deseos de ser sacerdote, diácono, profeta, doctor, misionero, mártir… Pero pronto encuentra su vocación al leer un pasaje de S. Pablo sobre la caridad (I Cor, 13). Todo queda claro para ella y puede escribir "¡ Oh, Jesús, amor mío, he encontrado al fin mi vocación ! ¡Mi vocación es el Amor!… Sí, he encontrado mi puesto en la Iglesia y ese puesto, Dios mío, eres Tú quien me lo ha dado. En el corazón de la Iglesia, mi madre, yo seré el amor. Así lo seré todo ¡¡¡ Así mi sueño se verá realizado !!! (Manuscrito B, 3 v). Cada vez más atormentada por la inquietud de que los pecadores no conozcan este amor misericordioso de Dios, en Pascua de 1896, entra en una noche oscura en la que su fe y su esperanza combaten. Mientras tanto, una tuberculosis mina su salud y la debilita. Teresa emplea sus últimas fuerzas en enseña "su camino de infancia espiritual" a las cinco novicias que tiene a su cargo y a sus hermanos espirituales, sacerdotes y misioneros en Africa y China.

Viviendo esta compasión en unión con Cristo en Getsemaní y en su Cruz, agotada por las hemoptisis, guarda su sonrisa y su exquisita caridad para animar la moral de sus hermanas, consternadas al verla morir llena de atroces sufrimientos. Por obediencia continúa, hasta el agotamiento, la redacción de sus recuerdos en los cuales, con una verdad transparente, "canta las misericordias del Señor" en su corta vida. Pidiendo "hacer el bien en la tierra después de su muerte, hasta el fin del mundo", profetizando humildemente que su misión póstuma sería enseñar su caminito a las almas y "pasar su cielo haciendo el bien en la tierra", muere el 30 de septiembre 1897.

Un año después de su muerte se publica un libro a partir de sus escritos : Historia de una Alma, que va a conquistar al mundo y dará a conocer a esta joven religiosa que había amado a Jesús" hasta morir de amor". Una vida escondida iba a iluminar el mundo. Y esto dura ya más de cien años…

"Mi caminito", como lo llamáis...
El camino espiritual de Teresa Martin fue solitario. Cierto que recibió mucho de su familia, de sus educadores y de sus maestros del Carmelo, pero ningún sacerdote la marcó profundamente. El Espíritu Santo trazó en ella un sendero de autenticidad - "No he buscado mas que la verdad" - que le reveló las profundidades del Amor trinitario y un " caminito" para unirlos sin ninguna preocupación didáctica. Todo surgió de la vida, de los acontecimientos cotidianos releídos a la luz de la Palabra de Dios. Su aportación incomparable a la espiritualidad del siglo XX es una vuelta al Evangelio en su pureza más radical. " Si no os hacéis como niños no entraréis en el reino de los Cielos". (Mateo 18,3).
Es verdad que Teresa no dispuso de un texto completo del Antiguo Testamento, pero descubrió la meditación de la Palabra de Dios. Sin ninguna iniciación, sin ninguna cultura bíblica, cita más de mil veces la Biblia en sus escritos. A los 22 años dos textos del Antiguo Testamento cristalizan después de una larga búsqueda, en el descubrimiento de " la vía de la infancia espititual" que será su gran aportación.

"Quiero ser santa"
Teresa, apasionada adolescente, ha decidido ser santa. En el Carmelo, cuando era postulante, escribió a su padre: "Labraré tu gloria haciéndome una gran santa".
Pero, muy pronto , va a comprobar su debilidad y su impotencia cuando se compara con los santos. Le parecen una montaña mientras ella no es mas que un granito de arena. " Mi crecimiento es imposible"piensa, pero no se desanima. Si Dios ha puesto en ella esos deseos de santidad es porque debe tener un caminito para escalar " la dura escalera de la perfección".

La palabra de Dios le descubre el camino:" Si alguno es pequeño que venga a Mí" (Proverbios 9,4). "Entonces yo fui"- escribe Teresita- preguntándose qué haría Dios con el pequeño que fuese a Èl. Leyendo Isaías 66, comprendió que no podía subir sola la escalera de la perfección , pero que Jesús la cogería en sus brazos y la subiría como en un ascensor rápido.
Desde entonces Teresita no encuentra ningún obstáculo , al contrario, será pequeña y ligera en los brazos de Jesús y será santa por un camino rápido.
Así cuenta Santa Teresita el descubrimiento de" su caminito" (Manuscrito C, 2).

Su descubrimiento es que Dios es esencialmente Amor Misericordioso. En adelante verá todas las perfecciones divinas, incluida la justicia, partiendo de la Misericordia.
Esto conlleva una confianza audaz: "Quiero ser santa, pero siento mi impotencia y te pido, Dios mío, que seas Tú mismo mi santidad" (Acto de ofrenda).
Dejar hacer a Dios no implica ningún infantilismo fácil. Teresa hará todo lo posible para mostrar ,cada día y cada minuto, su amor a Dios y a sus hermanas en una total gratuidad: la del amor.

En todas las situaciones y en todos los actos de su vida Teresa aplica esta regla: Si Dios le pide algo y ella se siente incapaz de hacerlo, Èl lo hará por ella. Un ejemplo: amar a todas sus hermanas como Jesús las ama le es imposible. Entonces, uniéndose a Èl, será Èl quien las amará en Teresa:" Sí, lo sé, cuando soy caritativa , es únicamente Jesús quien actúa en mí. Cuanto más unida estoy a Èl, más amo a todas mis hermanas"( Manuscrito C, 13 r̊).

He aquí un camino de santidad que se abre a todos, a los pequeños, los pobres, los que sufren: aceptar la realidad de las propias debilidades y ofrecerse a Dios tal como uno es para que Èl intervenga en nosotros.

Todo se comprende mejor cuando vemos que la frase anterior de Teresa está en las antípodas de la cursilería y muy cerca de la infancia evangélica predicada por Jesús:"Jesús se complace en mostrarme el único camino que conduce a esa hoguera divina. Ese camino es el abandono del niñito que se duerme sin miedo en los brazos de su padre" (Manuscrito B, 1v̊).
Sus intuiciones hacen de ella una precursora de las grandes verdades del Vaticano II: primacía, sobre todas las devociones, del Misterio Pascual de Jesús , camino de santidad para todo bautizado; Mariología que ve en María"más una Madre que una Reina" que vivió la prueba de la fe (cf. Poema"Por que te amo María", testamento mariano, mayo 1897); Eclesiología de comunión fundada en la presencia del Amor (Espíritu Santo) en el corazón de la Iglesia , que anima todas las vocaciones complementarias en la Comunión de los Santos del Cielo y de la tierra.

Revolución también en la concepción de los fines últimos: no al descanso, sí a la acción:
"Quiero pasar mi cielo haciendo bien en la tierra"
Teresa, sin saberlo, ha abierto caminos de ecumenismo: su lectura de la epístola a los Romanos sedujo a los luteranos. Los cristianos ortodoxos la aman como a S. Francisco de Asís (Símbolos universales utilizados por estos dos santos facilitan la inculturización en otras civilizaciones).

Su misión Su influencia universal
Fue en la catedral de S. Pedro. Un domingo, al finalizar la misa en la que Teresa había recibido la Eucaristía, cuando cerraba el misal, se conmovió profundamente al ver una imagen de Jesús en la Cruz que se deslizaba de una de sus páginas :
" Sentí un gran dolor al pensar que aquella sangre caía al suelo sin que nadie se apresurase a recogerla. Tomé la resolución de estar siempre, con el espíritu, al pie de la Cruz para recibir el rocío divino que goteaba de ella, y comprendí que luego debería derramarlo en las almas. . .
También resonaba continuamente en mi corazón el grito de Jesús en la Cruz:"¡ Tengo sed !". Estas palabras encendían en mí un ardor desconocido y muy vivo…Quería dar de beber a mi Amado y yo misma me sentía devorada por la sed de almas…No eran todavía las almas de los sacerdotes las que me atraían, sino las de los grandes pecadores; ardía en deseos de arrancarlos del fuego eterno…" (Manuscrito A ,45 v̊)

Su misión en el Carmelo
Para ser más misionera, Teresa se siente llamada al Carmelo tras los pasos de Santa Teresa de Avila, su "Madre", por el don de su vida y la oración que traspasa todas las fronteras. Como la Santa española,"quisiera dar mil vidas para salvar una sola alma".
Al entrar en el Carmelo declara :
"He venido para salvar almas pero, sobre todo, para orar por los sacerdotes."
"Amar a Jesús y hacerlo amar debe de ser, cada vez más, la meta de mi vida."
Siente una gran alegría cuando le ofrecen dos hermanos espirituales para que les apoye en su ministerio:
El seminarista Mauricio Bellière, de veinte años, pide la ayuda de una carmelita para que rece por su vocación. Será Padre Blanco y partirá a Nyassland ( hoy Malawo). Volverá a Fancia y morirá hospitalizado en el Buen Salvador de Caen en 1907 ,a los treinta años. Teresa le ayudará mucho con sus cartas. Le escribirá once y todas muy importantes;

El P. Adolfo Roulland, de las Misiones Extranjeras de París, se escribirá tambien con Teresa después de celebrar su primera misa en el Carmelo y tener una conversación con ella. Partirá a China, a Su-Tchuen . Murió en Fancia en 1934. Teresa le escribirá seis cartas.
Los dos permitieron a Teresa extender sus horizontes a todo el mundo. Enferma, "andará por un misionero".
Los "deseos infinitos" que la hacen sufrir en la oración la impulsan a escribir :
"Recorrer la tierra (…)Anunciar el Evangelio
en las cinco partes del mundo y hasta en las islas más remotas…
Quisiera ser misionero no sólo durante algunos años,
sino haberlo sido desde la creación del mundo
y seguir siéndolo hasta la consumación de los siglos…"
(Manuscrito B,3 r̊)

Su misión el el cielo
Este deseo se va a intensificar hasta en su lecho de agonía, en la esperanza de seguir siendo misionera después de su muerte :
"Tengo la confianza de que no voy a estar inactiva en el cielo.
Mi deseo es seguir trabajando por la Iglesia y por las almas.
Así se lo he pedido a Dios y estoy segura de que me va a escuchar."(Carta 254)
"Presiento que mi misión va a comenzar,
mi misión de hacer amar a Dios como yo lo amo,
de enseñar mi caminito a las almas "(JEV,85)
"Quiero pasar mi cielo haciendo el bien en la tierra"(JEV,85)

Patrona universal de las Misiones
Lo más asombroso es que la Iglesia la proclamó Patrona universal de las Misiones en 1927.
Ademas, Sor Teresita, sin haber abandonado jamás su celda, totalmente llena del Amor Misericordioso de Dios en lo cotidiano de su vida, irradió en el mundo las misericordias del Corazón de Dios.
Las vocaciones teresianas
Después de la muerte de Teresa, innumerables vocaciones sacerdotales y religiosas nacieron de su encuentro con Teresa. Ella cumplió sus promesas. Muchísimos sacerdotes y misioneros le han confiado su ministerio.
Más de 50 Congregaciones en el mundo viven la espiritualidad de Santa Teresita. Son ,por lo general, Congregaciones religiosas que han incorporado el mensaje teresiano a su cultura. Sus miembros son unos 5000.


EL PAPA PROCLAMA A TERESA DE LISIEUX DOCTORA DE LA IGLESIA

El pontífice la considera uno de los más «grandes maestros de la espiritualidad»

CIUDAD DEL VATICANO, 19 oct. 97 - Eran las diez de una espléndida mañana de octubre en la plaza de San Pedro. Juan Pablo II ante unos 70 mil fieles, ante 16 cardenales y numerosos obispos, ante una delegación oficial francesa y ante el cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede, declaraba doctora de la Iglesia universal a Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz, una muchacha normanda que murió a los 24 años de edad y que nunca pisó un aula universitaria.

Con este título el pontífice reconoce que la doctrina propuesta por Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz puede ser un punto de referencia para todos los cristianos del mundo no sólo porque se adecua perfectamente a la verdad, sino también porque ofrece nueva luz sobre los misterios de la fe. En la homilía, Juan Pablo II explicó por qué una joven santa carmelita, fallecida a los 24 años, que no estudio teología sistemáticamente, compartirá a partir de hoy el prestigioso reconocimiento reservado a hombres de la estatura intelectual de santo Tomás de Aquino, san León Magno o san Juan de la Cruz. «Entre los “doctores de la Iglesia" –aclaró el Papa–, Teresa del Niño Jesús es la más joven, pero su ardiente itinerario espiritual muestra gran madurez y las intuiciones de la fe expresadas en sus escritos son tan amplias y profundas que le merecen figurar entre los grandes maestros de la espiritualidad».
A continuación el obispo de Roma explicó la importancia del mensaje de Teresa para la sociedad de que se propone cruzar el umbral del tercer milenio: «En una cultura racionalista y demasiado a menudo invadida por un materialismo práctico ella opone con una sencillez que desarma "la pequeña vía" que conduce al secreto de toda existencia: el Amor divino que envuelve y penetra toda la aventura humana».
«En un tiempo como el nuestro, caracterizado por la cultura de lo efímero y del hedonismo, esta nueva Doctora de la Iglesia se muestra dotada de una singular eficacia para esclarecer el espíritu y el corazón de los que tienen sed de verdad y de amor». Santa Teresa de Lisieux, penetrando en el espíritu del Evangelio y la pasión de la reformadora del Carmelo, santa Teresa de Avila, profundizó la mística centrada en el amor, que ella llamó la «pequeña vía de la infancia espiritual», experiencia íntima que recogió en su libro «Historia de un alma», traducido a 50 idiomas. Sus escritos aportan, entre otras cosas, la experiencia espiritual de los dos últimos años de su vida, debatidos en medio de la enfermedad que la llevó a la tumba, en la que no faltó la prueba de la duda y de la crisis de fe.
Canonizada en 1925 por Pío XI, este mismo Papa la proclamó, junto con san Francisco Javier, patrona universal de las misiones, pese a que durante su vida religiosa jamás franqueó los muros de su convento de Lisieux, aunque deseó ardientemente ser misionera. Juan Pablo II, que anunció la declaración de santa Teresa de Lisieux como Doctora de la Iglesia durante las Jornadas Mundiales de la Juventud del pasado mes de agosto en París, propone también a Teresita como patrona de los jóvenes. Ante miles de adolescentes de la Acción Católica italiana, el Santo Padre explicó el 18 de octubre que Santa Teresa de Lisieux fue una religiosa de clausura excepcional, pero que igualmente hubiera sido una buena joven de Acción Católica.



TERESA DE LISIEUX, UN EJEMPLO PARA LOS JOVENES DE HOY
Juan Pablo II se adentra en el seductor legado místico de la nueva doctora de la Iglesia.

CIUDAD DEL VATICANO, 20 oct. 97 (ZENIT).- Se podría decir que santa Teresa de Lisieux está batiendo todos los récords: primero fue proclamada patrona de las misiones (junto a san Francisco Javier), ayer fue declarada Doctora de la Iglesia, y hoy el Papa habló de ella como una especie de patrona de la juventud. De echo, no es casualidad que el pontífice diera la noticia de su doctorado durante las Jornadas Mundiales de la Juventud de París.

«Creo que los jóvenes pueden encontrar efectivamente en ella una auténtica inspiradora para guiarles en la fe y en la vida eclesial, en una época en la que el camino puede estar lleno de pruebas y dudas», explicó el Santo Padre al recibir en audiencia a los peregrinos que habían venido a Roma para participar en la proclamación de la tercer mujer como doctora de la Iglesia universal «Teresa experimentó diferentes pruebas, pero recibió la fuerza para permanecer fiel y confiada».

Karol Wojtyla sabe muy bien que las rosas con que se suele simbolizar la vida y el testimonio de la santa normanda están llenas de espinas. Teresa Martín experimentó eso que los místicos llaman «la noche de la fe», es decir, las dudas, el abandono total, la tentación de la desesperación. Por ello, explicó Juan Pablo II ella ahora «sostiene a sus hermanos y hermanas en todos los caminos del mundo».

Los tremendos sufrimientos y dudas de esta muchacha aparecen la edición de las obras completas (1.600 páginas) de santa Teresa del Niño Jesús que acaba de editar la Librería Editora Vaticana. En esta magna obra editorial se recogen las tremendas palabras, pronunciadas el 30 de septiembre de 1897, poco antes de morir, minada por la tisis: «No puedo respirar, no puedo morir, no sabré nunca morir… sí, Dios mío, sí…».

Hablando en castellano, el Papa resumió lo esencial de la aportación mística de Teresa. Lo hizo como si contara la trama de una película, con frases breves y directas. De hecho, la mística ha sido siempre la pasión de Juan Pablo II que hizo su tesis doctoral en teología sobre san Juan de la Cruz. «Partiendo del amor que la une a Cristo, comienza a identificarse con la Bien amada del Cantar de los Cantares: "llévame en pos de ti" —explicó el Papa—. Después comprende que, con ella, el Señor atrae la multitud de los hombres, puesto que su alma tiene un inmenso amor por ellos. "Todas las almas a quienes ama son arrastradas a seguirla". Con una maravillosa audacia y finura espiritual, Teresa se apropia de las palabras de Jesús después de la Cena, para decir que también ella entra a formar parte del gran movimiento por el que el Señor atrae a todos los hombres y los conduce al Padre: "Vuestras palabras, ¡oh Jesús!, son , por lo tanto, mías y puedo servirme de ellas para atraer sobre las almas, que están unidas a mí, los favores del Padre celeste"».


ORACIÓN DE STA. TERESITA A LA VIRGEN MARÍA


"Para que una hija
pueda a su madre querer,
es necesario que ésta
sepa llorar con ella,
que con ella comparta
sus penas y dolores.

¡Oh dulce Reina mía!,
cuántas y amargas lágrimas
lloraste en el destierro para ganar mi corazón,

¡oh Reina!
Meditando tu vida
tal como describe el Evangelio,
yo me atrevo a mirarte
y hasta a acercarme a ti.

No me cuesta creer que soy tu hija,
cuando veo que mueres,
cuando veo que sufres como yo".