HORARIOS DE LAS MISAS EN LA PARROQUIA DE ÍLLORA

HORARIOS DE LAS MISAS EN LA PARROQUIA DE ÍLLORA

DESCUBRIENDO LA SÁBANA SANTA

DESCUBRIENDO LA SÁBANA SANTA

CELEBRACIÓN DEL PERDÓN Y EL AMOR DE DIOS

CELEBRACIÓN DEL PERDÓN Y EL AMOR DE DIOS

TRIDUO CUARESMAL DE LAS COFRADÍAS DE LA PARROQUIA DE ÍLLORA

TRIDUO CUARESMAL DE LAS COFRADÍAS DE LA PARROQUIA DE ÍLLORA

PREGÓN DE LA SEMANA SANTA DE ÍLLORA 2024

PREGÓN DE LA SEMANA SANTA DE ÍLLORA 2024
A CARGO DE D. SEBASTIÁN CRESPO TORRALBA

NUESTRA MADRE DEL CARMEN DE ÍLLORA

CELEBRACIÓN VIRGEN DE LOURDES 2018 EN LA PARROQUIA DE ÍLLORA

miércoles, 27 de noviembre de 2013

FIESTA DE LA VIRGEN MILAGROSA

El 27 de noviembre de 1830 la Virgen Santísima se apareció a Santa Catalina Laboure, humilde hija de la caridad, y se le apareció de esta manera: La Virgen venía vestida de blanco. Junto a Ella había un globo luciente sobre el cual estaba la cruz. Nuestra Señora abrió sus manos y de sus dedos fulgentes salieron rayos luminosos que descendieron hacia la tierra. María Santísima dijo entonces a Sor Catalina:

"Este globo que has visto es el mundo entero donde viven mis hijos. Estos rayos luminosos son las gracias y bendiciones que yo expando sobre todos aquellos que me invocan como Madre. Me siento tan contenta al poder ayudar a los hijos que me imploran protección. ¡Pero hay tantos que no me invocan jamás! Y muchos de estos rayos preciosos quedan
perdidos, porque pocas veces me rezan".


Entonces alrededor de la cabeza de la Virgen se formó un círculo o una aureola con estas palabras: "Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a Ti".

La devoción a la Virgen Inmaculada ha sido desde entonces muy extendida entre las Hijas de la Caridad, allá dónde han estado presentes. Se imprimieron medallas con la imagen que había contemplado Santa Catalina Labouré, con la invocación: ¡Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!, y fué tal la acogida entre el pueblo cristiano, que junto al escapulario de la Virgen del Carmen, son los dos sacramentales más venerados en el pueblo cristiano.
Los prodigios que se le atribuyen a esta medalla, no utilizada como un talismán, sino como un recordatorio de que como cristianos, debemos vivir coherentemente con nuestra fe, hizo que muy pronto se le añadiera el apelativo de "milagrosa", y que por ende, a la Virgen Inmaculada de las Hijas de la Caridad, se le llame, Virgen Milagrosa.

En Íllora, junto a las Capillas de la Virgen del Carmen, también visitaban los domicilios de los vecinos, una Capilla de la Virgen Milagrosa, y también de la Virgen del Perpetuo Socorro.

Cada año, celebramos la fiesta de la Virgen Milagrosa, el 27 de Noviembre, trasladando desde el domicilio particular que posee esta Capilla de la Virgen a la Iglesia dicha Capilla, y celebrando un Triduo en su honor.

Ayer comenzamos este Triduo, que terminará mañana Jueves.

A las 6 y media de la tarde comenzamos rezando el Santo Rosario, las oraciones propias del Triduo, y a las siete de la tarde, D. José Luis Ontiveros López, nuestro Párroco, preside y predica la Eucaristía. 






















domingo, 24 de noviembre de 2013

D. MANUEL MONTOYA PELÁEZ, SACERDOTE. DESCANSE EN PAZ.


Aquel Domingo, 20 de Octubre, él quiso levantarse con presteza de la cama en la que se encontraba ya en las últimas. Venía cansado de
un largo camino de calvario. Había luchado hasta
el final de forma confiada y pacífica, aceptando
de antemano la hora predeterminada.
Cuando aquella mañana se abrió la puerta dijo “aquí estoy”, y sonrió… y se puso a caminar por la senda que lleva al cielo.
Había nacido en Zújar y su andadura por este mundo
rebasaba en unos meses los ochenta años.
Tras los estudios en Málaga y Granada pidió ser consagrado como sacerdote católico. Contaba entonces veinticuatro años.
Y en el ardor de su juventud comenzó un servicio sacerdotal que le llevó desde la costa motrileña hasta los pueblos alpujarreños de Alcázar, Fregenite y Olías, para pasar después a la zona de Sierra Elvira: Tiena, Valderrubio, Escoznar, Pinos Puente.
Temporalmente fue misionero voluntario en Hispanoamérica.
Su rica personalidad hizo que le llamaran para formar parte de varios organismos diocesanos importantes, y en 1983 el arzobispo D.José Méndez le confió la vicaría general del arzobispado, que lleva consigo algo así como ser el “doble” de la mayor jerarquía eclesiástica en la Iglesia local.

Los muchos años al frente de esta gran responsabilidad indica la confianza plena que el querido arzobispo, fallecido en el 2006, depositó en él.

Su capacidad de diálogo, su simpatía y su sencillez de corazón hicieron que sacerdotes, religiosos y laicos lo tuvieran como el hombre cercano y honesto que se empeñaba en los asuntos que le proponían.

Su trato con él confortaba, al estilo del arzobispo granadino -“el hombre más bueno que yo he conocido”, escribió
D. Manuel Montoya de él- , que lo llamó a su lado.

Los habitantes de los pueblos a los que ha servido –el último, el Cerrillo de Maracena, tras su jubilación de canónigo y deán de la catedral-, los miembros de los equipos del Movimiento Familiar Cristiano con los que ha convivido la gozosa aventura de la fe, atestiguan su densa experiencia religiosa y su sabiduría humana.
Su nombre resuena en los labios y en la memoria de tantos que le trataron, como nosotros en nuestra parroquia, que lo queremos, como justa respuesta a su total entrega.

Dice un salmo: “Mirad el desenlace de su vida para
saber la verdad de su existencia”.

Manolo Montoya ha certificado con creces su autenticidad de cristiano durante los años que la enfermedad le ha atenazado.

Contaba sus achaques como si fueran de otro, sin el menor gesto de tristeza y menos aún de rebeldía.

Le dolía que sus hermanos tuvieran que sufrir por él, y disimulaba su agonía interior.
Abrazó la cruz amorosamente. Y se dejó caer en los

brazos del Padre. 

viernes, 22 de noviembre de 2013

ENTRE CASTAÑA Y CASTAÑA...CATEQUESIS SOBRE LA FIESTA DE TODOS LOS SANTOS Y LA CONMEMORACIÓN DE TODOS LOS FIELES DIFUNTOS

En los días siguientes a la Festividad de Todos los Santos, y la Conmemoración de todos los fieles difuntos, hemos tenido unas tardes muy animadas, con todos los grupos de catequesis de nuestra Parroquia de Íllora.
A iniciativa de nuestro Párroco, hemos organizado una fiesta de las castañas...algo que no puede faltar en nuestras casas en estos días, y de camino, con fichas animadas con dibujos, y la colaboración de los catequistas, hemos explicado el sentido de estas fiestas, y lo que es propio de nuestra cultura, y no lo que hemos importado de otras.























































































































Y es que nuestro Párroco, se siente un niño más entre ellos, y comparte la misma ilusión que brota de sus ojos.

También recordando nuestra propia infancia, organizamos un concurso de faroles hechos de melón, que nos llamó la atención, la cantidad de niños que vinieron con ellos, a pesar de que a la misma hora, había una fiesta de Halloween organizada por nuestro Ayuntamiento. Todos los que participaron se llevaron su regalo.











Gracias a nuestro Párroco, vivimos unos momentos inolvidables para todos...y muy educativos.