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Las cuatro de la tarde, de un Sábado, víspera de Domingo de Ramos, cuando más de un centenar de personas, de Tocón, Brácana, Alomartes e Íllora, comenzaban a caminar, detrás de la Cruz de Cristo, hacia la Parroquia de Íllora, meditando cada una de las catorce estaciones, de un Viacrucis, muy trabajado con los niños de catequesis.
Todos habían puesto mucha ilusión en volver a retomar, aquel antiguo viacrucis entre Íllora y Alomartes, y la verdad, que la respuesta fue insuperable.
Ni el calor impidió vivir intensamente esos momentos, caminábamos con Jesús a nuestro lado, y parecía que el camino se hacía cada vez más corto, y nosotros sin querer terminar.
Enhorabuena a D.Juan Carlos y D. José Luis, por decidirse a emprender este camino de encuentro entre comunidades parroquiales muy diversas, pero que nos aportan mucho unas a otras, pues en la diversidad está la fuente de nuestra riqueza.
En el viacrucis, había niños, jóvenes, adultos, mayores, matrimonios, catequistas...como una gran granada, cuyos granos unidos, logran todo lo que se propongan.
Que este sea un nuevo inicio, que marque un antes y un después.
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