Eran las seis de la mañana, y nos íbamos congregando en la puerta de la Hermandad de San Rogelio, peregrinos venidos de Escóznar, Alomartes, y todos los que desde Íllora, nos habíamos decidido a ponernos a caminar hacia el Santuario del Cristo del Paño en Moclín.
Más de cincuenta peregrinos después de una sencilla oración, nos pusimos en camino, llenos de ilusión, y animados por la unión y la amistad que se respiraba en el ambiente.
Las lluvias de los últimos días, hicieron que el camino estuviera a tramos lleno de barro, pero las manos y hombros tendidos de todos, dispuestos a ayudar, hicieron que como en la propia vida, la unión hiciera superar todas las dificultades que nos encontrábamos.
Una procesión de linternas se adentró en los senderos que nos llevaban hacia Puerto Lope, y de ahí, hacia nuestra meta: el encuentro personal y comunitario con el Señor, que en la Eucaristía, nos íba a iluminar con su Palabra, nos íba a alimentar con su Cuerpo.
A las 9 y media de la mañana, un autobús también acercaba a otros peregrinos desde Íllora, que también querían unirse a nosotros en la oración, y en la gratitud al Señor, que nunca nos abandona, que siempre permanece fiel y solícito para ayudarnos en todos momento.
Y cuando llegamos ante Él, Él ya nos esperaba, con esa mirada profunda, con esa mirada penetrante, con esa mirada que te cala interiormente, y ante la que nunca te puedes mantener indiferente.
¡Oh Señor, Divino Cirineo en nuestra vida! Llevas sobre Tí, el peso de nuestras angustias y problemas, el desaliento de las contrariedades, el miedo al día a día, la falta de esperanza ante nuestras enfermedades...
Y tus Palabras siguen siendo vida y luz para nosotros....¡Venid a Mí, todos los que estáis cansados y agobiados, que Yo os aliviaré!...
Y hasta Tí venimos, Señor, porque sabemos que sólo Tú, tienes Palabras de vida eterna...
porque sabemos que eres la fuente de todo lo que esperamos y anhelamos.
Y Tú, Señor, nos has llenado de paz, de consuelo, de salud, de fe....¡gracias Señor, por tanto cómo nos has dado en ese día...por tanto cómo nos has dado cada día de nuestra vida!
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